Anatomía

Órganos reproductores femeninos

El sistema reproductor femenino de los mamíferos está compuesto por los ovarios, el tubo uterino u oviducto, el útero, la cérvix, la vagina, el vestíbulo y la vulva.


El tracto reproductivo en los mamíferos es muy similar, solo varía en tamaños. Además, está diseñado para cargar numerosos fetos durante una misma preñez, lo cual se conoce como multípara.


Los Ovarios


El ovario es la gónada femenina. Sus funciones principales son: producir óvulos listos para la fertilización del esperma masculino y actuar como glándula endocrina, secretando hormonas como estrógenos y progesterona.


En los mamíferos, existen un par de ovarios que se ubican a cada lado de la cavidad abdominal, caudal a los riñones y sostenidos por el ligamento suspensorio. El ovario se encuentra suspendido a la cavidad dorsal del cuerpo, por medio del mesovario.


El tejido ovárico está compuesto por una red de tejido conectivo, músculo liso y vasos capilares dentro de los cuales hay una gran cantidad de células germinativas y folículos en desarrollo. En los animales inmaduros cada ovario tiene forma ovalada, pero conforme crecen los folículos, durante el desarrollo sexual, se van volviendo nodulares.


Tubo uterino


También llamado oviducto y sus funciones son: colectar el óvulo liberado, por los folículos del ovario; transportar el óvulo, desde los ovarios hasta los cuernos uterinos y provee el ambiente adecuado para la sobrevivencia, tanto del óvulo como del esperma.


Cada tubo uterino se encuentra cercano al ovario. Se observa como una estructura compleja y estrecha que finaliza en una terminación abierta, conocida como infundíbulo que captura el óvulo cuando es liberado por el ovario.


Útero


En los mamíferos, el útero tiene forma de Y, se ubica en la línea media del abdomen dorsal. Durante la preñez, el peso del feto lo empuja ventralmente. En la preñez avanzada, abarca gran parte del abdomen. Entre sus funciones están ser el receptáculo del óvulo fecundado, donde el embrión se desarrolla hasta su término; proveer el ambiente adecuado para la sobrevivencia del embrión y el medio por el cual, el embrión en desarrollo, recibe los nutrientes de la madre, por medio de la placenta.


El útero se divide en dos partes, formado por un par de cuernos uterinos. Cada cuerno es cinco veces la longitud del cuerpo uterino y, durante la preñez, contiene el embrión en desarrollo. Los dos cuernos se unen para formar el cuerpo del útero.


La pared del útero está formada por tres capas que corresponden al endometrio el cual durante la preñez provee la nutrición del embrión antes de su formación y soporta el desarrollo de la placenta. El miometrio produce contracciones fuertes durante el parto y el mesometrio se encarga de mantener suspendido el útero, a la pared dorsal del cuerpo y se continua con el mesovario.


El cervix (cuello del útero)


Es un esfínter muscular corto que conecta el cuerpo uterino con la vagina. Se observa como un canal cervical estrechamente cerrado, el cual solo se relaja para permitir el paso del semen o del feto. Durante la preñez, el cervix se bloquea con un tapón de moco que protege el feto de una infección. En las hembras no gestantes, el cervix se ubica en la cavidad pélvica, pero durante la preñez el feto lo empuja craneal y ventralmente sobre el borde de la pelvis.


Irrigación del tracto reproductivo


Los vasos sanguíneos que corren dentro del mesovario y el mesometrio, son la arteria ovárica: surge de la aorta, caudal a la arteria renal e irriga al ovario y la arteria uterina: corre a ambos lados del cervix y se une con la arteria ovárica, irrigando la parte caudal del tracto reproductivo.


La vagina y el vestíbulo


La vagina y el vestíbulo forman un canal que conduce hacia la vulva, parte externa del tracto reproductivo. La vagina se dirige del cervix hasta el orificio uretral externo, que es el punto en el que la uretra se une con el tracto reproductivo. El vestíbulo se extiende del orificio uretral externo a la vulva y es compartido tanto por el tracto urinario como por el reproductor.


La vulva


La vulva marca la abertura externa del tracto urogenital. Está constituida por los labios verticales que se unen dorsal y centralmente, su función es mantener cerrada la entrada a la vagina para prevenir infecciones y el clítoris es el equivalente al pene masculino y está formada de tejido eréctil. Se ubica en la hendidura vulvar.


Las aves son ovíparas, es decir, se reproducen por medio de huevos y, por tanto, su sistema reproductor está adaptado para formarlos. La yema de huevo provee la nutrición necesaria para el desarrollo del embrión, en contraste con los mamíferos cuyos fetos son alimentados directamente por la madre, vía placenta.


La reproducción de las aves está influenciada por factores ambientales como el fotoperíodo, la temperatura y la alimentación. Estos factores, durante la época reproductiva, estimulan las gónadas llegando algunas especies a tener un incremento hasta de 1500 veces más que en época no reproductiva.


El sistema reproductor de las aves presenta un par de ovarios y un oviducto, que llega hasta la cloaca. Sin embargo, en muchas especies solo el ovario izquierdo está completamente desarrollado y es funcional. El ovario izquierdo se ubica sobre el polo craneal del riñón y caudal a la glándula adrenal. Se encuentra suspendido de un ligamento, el mesovario y recibe irrigación de la arteria renal craneal.


Fig. 106


Tracto reproductivo de un ave jabirú hembra

Durante la época reproductiva, el ovario desarrolla una gran cantidad de folículos, en diferentes estadíos, por lo que es fácilmente reconocible. Como en los machos, después de la época reproductiva, las gónadas de las hembras presentan una regresión importante.


El óvulo es transportado a través del oviducto, por las contracciones peristálticas. El oviducto ocupa la región dorso caudal izquierda, de la cavidad celómica. Es una estructura tubular y se encuentra dividida en cinco regiones: infundibulum, magnum, istmo, útero y vagina.


  • Infundíbulum: el oviducto tiene una forma de embudo, en su parte terminal, la cual envuelve al óvulo. Aquí ocurre la fertilización y la primera capa de albúmina es agregada.

  • Magnum: es la parte más larga y glandular del oviducto. La mayoría de la albúmina es agregada aquí, además de la adición de calcio, sodio y magnesio.

  • Istmo: es donde se forman las membranas internas y externas del cascarón.

  • Glándula de la cáscara o útero: en esta región el huevo toma sal y agua dentro de la albúmina y ocurre la calcificación de las membranas del cascarón, es decir se forma el cascarón. La calcificación ocurre en aproximadamente 15 horas y la pigmentación es adherida las últimas cinco horas. En el útero es donde el folículo pasa la mayor parte del tiempo (80%).

  • Vagina: es la comunicación del útero con el urodeo de la cloaca.

En los galliformes se da la formación completa del huevo en 25 horas, aproximadamente, mientras que en los psitácidos en 48 horas. El huevo consiste de un disco germinal, una yema, membranas de la yema, albúmina y el cascarón. El disco germinal puede tener un blastodisco, al no ser fertilizado o un blastodermo, al ser fertilizado. La yema contiene los nutrientes necesarios para alimentar al embrión, como la grasa y proteínas. La albúmina está formada por proteínas y, el cascarón, por carbonato de calcio y una matriz de fibras.


Como manejador de recursos naturales debe saber que si un ave no logra sacar el huevo por la cloaca y queda retenido, va a sufrir de distocia, que puede ocurrir por varias razones, como falta de un lugar adecuado para poner el nido, estrés, deficiencias de calcio o infecciones. En caso de distacia, el huevo debe ser extraído por un veterinario.


En algunas especies de aves no existe dimorfismo sexual,es decir, tanto hembra como el macho se ven iguales, tal es el caso de los psitácidos. Por tanto, las maneras de identificar el sexo de estas, es por medio de una prueba de ADN utilizando una gota de sangre o una pluma en crecimiento. O bien, al hacer un sexaje quirúrgico, para observar las gónadas de manera directa, este procedimiento solo puede ser realizado bajo anestesia general por un veterinario.


Al igual que las aves, los reptiles son ovíparos, por lo que el sistema reproductor de la hembra está adaptado para formar huevos. Sin embargo, algunos reptiles pueden ser ovovivíparos, es decir, retienen el embrión que está dentro del huevo, en el oviducto y parece que nacen individuos, no huevos. Sin embargo, los nutrientes son obtenidos de la yema de huevo, no de la madre. Como manejador de recursos naturales es importante que sepa que los reptiles, al igual que las aves, pueden sufrir de distocia.


Las lagartijas e iguanas tienen ovarios y oviductos pares, pero no tienen útero. El huevo sale del cuerpo por la cloaca. En algunas especies de lagartijas se producen sólo hembras y su reproducción es por medio de partenogénesis, es decir, la fertilización es por medio de huevos sin fertilizar, donde todas salen hembras.


En el caso de las serpientes, las hembras de especies muy delgadas tienen solo un oviducto y un ovario.


Al igual que las aves, los reptiles pueden tener o no dimorfismo sexual. En el caso de las tortugas, algunas pueden diferenciarse por características externas que presenta el individuo. Por ejemplo:


  • Los machos tienen colas más largas que las hembras.

  • El plastrón del macho es cóncavo, para poder montar el caparazón de la hembra.

  • El escudo caudal de la hembra puede estar curvado hacia arriba para permitir la elevación de la cola durante la cópula.

En el caso de las lagartijas e iguanas, la determinación del sexo depende de la especie, por ejemplo:


  • Dimorfismo sexual: muchas especies presentan diferencias en forma y color, entre ambos sexos. Los machos pueden tener colores vivos o crestas que atraigan a las hembras.

  • Base de la cola: los machos pueden tener la base de la cola más gruesa, ya que dentro están los hemipenes.

  • Presencia de poros femorales o preanales: diferentes especies muestran patrones de poros distintos en la superficie interna de la región inguinal.

En el caso de las serpientes, el método para determinar el sexo depende de la especie:


  • Dimorfismo sexual: en algunas especies es posible diferenciar los sexos por el color y marcas de la serpiente, por ejemplo, la boa hembra presenta marcas características en la cola que son de un rojo caoba brillante.

  • Largo de la cola: la cola se mide desde la cloaca a la punta. El macho, generalmente, la tiene más larga y el área alrededor de la cloaca puede verse agrandado, pues es donde se almacenan los hemipenes.

  • Tamaño: en algunas especies la hembra es más larga que el macho.

  • Con una sonda, pero solo alguien con experiencia, introduce dentro de la cloaca apuntando hacia la cola. En los machos la sonda avanza una distancia más larga que en las hembras.

En los anfibios, al igual que los reptiles, se da una reproducción ovípara, con una fecundación interna pero un desarrollo embrionario externo. Sus huevos son de cáscara blanda y necesitan estar expuestos al sol como a material en descomposición para madurar.


En las hembras de anfibio, los ovarios son lobulados y dentro de estos se da la formación de los folículos. Los óvulos o folículos pasan al oviducto a través del ostium, que es una abertura en el extremo anterior, con forma de embudo ciliado. Dentro del oviducto se da la formación del huevo. La parte posterior del oviducto se expande en un saco, que se vacía en la cloaca.


Los peces, la mayoría de los teleósteos tienen sexos separados. Sin embargo, existe una amplia variedad de patrones de reproducción y algunas especies pueden sufrir partenogénesis (consiste en el desarrollo de células sexuales femeninas, dando lugar a un nuevo individuo, sin necesidad de la intervención de la célula sexual masculina) y hermafroditismo(algunos peces poseen a la vez los órganos reproductivos usualmente asociados a los dos sexos). La fertilización puede ser:


  • Externa: la hembra pone los huevos en el agua y son fertilizados por el esperma masculino, que es colocado sobre ellos. Los peces hembras ponen gran cantidad de huevos porque muchos se pierden por depredación. Muchos huevos pueden ser dispersados, depositados en nidos o enterrados en el lodo del fondo del agua. Algunas especies pueden cargar los huevos fertilizados en la boca, hasta que nazcan.

  • Interna: visto en muchas especies vivíparas, donde el macho posee un órgano copulatorio que, usualmente, se modifica como aleta caudal para introducir el esperma en la hembra. Los huevos fertilizados son retenidos en el cuerpo de la hembra. Las hembras pueden guardar esperma en el oviducto por varios meses y, por tanto, se pueden producir varias nidadas con una sola cópula. Los huevos pueden alimentarse dentro del cuerpo hasta que salen como pececitos (ovovivíparos) o los huevos pueden eclosionar dentro del cuerpo y luego salir (oviviparos).

Glándula mamaria


A pesar de que este órgano no es estrictamente parte del tracto reproductor de los mamíferos, es esencial para la reproducción de los mismos, debido a que producen leche, que es esencial para la alimentación de los recién nacidos.


Las glándulas mamarias son glándulas cutáneas modificadas. Se ubican, externamente, en la pared ventral del abdomen y tórax, a cada lado de la línea media.


Cada glándula está compuesta de tejido glandular embebido en tejido conectivo, con un epitelio secretorio. La leche producida drena a través de redes que forman el canal del pezón. Este canal se abre al exterior, por medio del orificio del pezón. Cada glándula tiene un pezón, pero cada pezón tiene varios orificios.


La lactación o producción de la leche ocurre normalmente durante la preñez. Como recordaremos del módulo del sistema endocrino la lactación está influenciada por tres hormonas:


  • Progesterona: secretada por el cuerpo lúteo dentro del ovario, causa el agrandamiento de la glándula mamaria durante la gestación.

  • Prolactina: secretada por la glándula pituitaria anterior, en el último tercio de la gestación y estimula la producción de leche.

  • Oxitocina: secretada por la glándula pituitaria posterior, durante las última horas de la gestación, permite a las glándulas relajarse para procurar la salida de la leche, como respuesta a la succión del neonato.

La primera leche secretada por la madre, posterior al parto, es el calostro, rico en anticuerpos maternos que proveen al neonato de una inmunidad natural, contra enfermedades a las que la madre se ha visto expuesta. Es esencial que el neonato tome calostro las 24 primeras horas de vida, pues es el tiempo que tiene el intestino para absorber los anticuerpos proteicos por el intestino delgado, sin ser digeridos. Después de 24 horas inicia la digestión de las proteínas y, por tanto, los anticuerpos son destruidos. Luego de pocos días, el calostro para de producirse y sale la leche normal.


El ciclo estral


Es el ciclo rítmico de eventos que ocurren en la madurez sexual de las hembras de mamífero no preñadas. Incluye períodos de receptividad sexual conocidos como estro. La función del ciclo estral es producir óvulos listos para la fertilización por parte de los espermatozoides masculinos; preparar al tracto reproductivo femenino para recibir el óvulo fertilizado; iniciar patrones de comportamiento en la hembra, que indiquen que está receptiva para la cópula del macho y estimular a la hembra para quedarse quietas para permitir la cópula con el macho.


Cada ciclo se divide en varias fases. En el proestro, el tracto reproductivo está bajo la influencia de los estrógenos. En el proestro, la hembra está receptiva para la cópula. En el metaestro, el tracto reproductivo está bajo la influencia de la progesterona y el anestro, es el período entre ciclos estrales, en el cual hay poca o ninguna actividad ovárica.