I. Innovación

Recientemente, Costa Rica ha ocupado el primer lugar de América Latina en el ranking de innovación. Este considera sus insumos o condiciones para la innovación y sus resultados o productos. El primer enfoque valora contexto o instituciones, las capacidades del talento nacional y la investigación, la infraestructura, la sofisticación del mercado y de los negocios. Respecto a resultados, considera el conocimiento generado, la tecnología y las creaciones. (Cornell, INSEAD, WIPO, 2015).

El perfil de Costa Rica, es decir, tamaño, nivel educativo, apertura y ubicación hacen que la diferenciación sea la estrategia viable para competir. El país no ofrece las condiciones para producir y competir a escala o por costo. Por lo anterior, Costa Rica debe convertirse en un espacio para promover, intensivamente, la innovación y la sofisticación de negocio.

Por su parte, la naturaleza del parque empresarial indica que las herramientas para innovar deben basarse más en el talento y en la colaboración y menos en las grandes inversiones. Estas condiciones hacen ideales los instrumentos que se exponen en seguida, a saber, design thinking, realidad virtual e interfaz.

Los tres pueden ser aprovechadas para el diseño de estrategias de gestión de comercialización, pero se destaca un sector de la economía que tiene gran potencial en Costa Rica y en sectores enfocados en la innovación, conocida como la “economía naranja”, y equivalente a los emprendimientos derivados de la cultura.