Las ventas minoristas muestran síntomas de evolución: tanto las empresas globales como las locales. Según Stephens (2016), muchos sitios en internet hacen, de forma excelente, lo que las tiendas tradicionalmente hacían: ofrecer productos o servicios, la información detallada de ellos y procesar la compra; y por esta razón, las ventas onlinemuestran el crecimiento constante.
Esta situación ha amenazado y transformado diversos formatos de negocio, como los de la música, los alimentos, los restaurantes, los juguetes, los dispositivos electrónicos, etc. No obstante, según este autor, las empresas dedicadas a la moda se han mantenido tranquilas, creyendo que no cambiará porque las personas desean probar la ropa antes de decidir su compra.
Aunque el deseo de ver y probar pueda seguir motivando a las personas a visitar tiendas, lo cierto es que las nuevas generaciones aportan nuevas demandas y podrían provocar grandes transformaciones en los formatos de venta al detalle. Especialmente, se refiere a las grandes cadenas de tiendas con presencia internacional o global.
Los autores no coinciden en una sola propuesta de instrumentos o estrategia sobre esta transformación, pero los componentes que aparecen, con mayor frecuencia entre los investigadores, se pueden agrupar en cuatro instrumentos de transformación positiva que se mencionan a continuación:
La evolución de las empresas minoristas, globales y locales tiene un efecto importante en la gestión de comercialización y viceversa. Este proceso debe construirse en el marco de su contribución a la mejora de la calidad de vida y la sostenibilidad.